El pasado 11 de agosto, nuestra estudiante Karen Lorena Delgado Muñoz sustentó su tesis doctoral titulada: “Modelo de valoración financiera como apoyo a los procesos de transferencia y negociación de una tecnología en materiales biodegradables”. Sus directores fueron los profesores Diego Fernando Manotas Duque de la Escuela de Ingeniería Industrial de la Universidad del Valle y el profesor Héctor Samuel Villada Castillo de la Universidad del Cauca. El comité evaluador estuvo conformado por: el Dr. Jorge Luis García Alcaraz de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, México, el Dr. Cuauhtémoc Sánchez del Instituto Tecnológico de Orizaba, México y el Dr. José Roberto Díaz Reza del Instituto Tecnológico de Ciudad Juárez, México. Su trabajo fue aprobado y los evaluadores solicitaron unánimente que fuera considerado para una distinción.
Karen, quién será la egresada número 13 del programa de Doctorado en Ingeniería – énfasis en Ingeniería Industrial es Investigadora coordinadora del componente de “Desarrollo de un esquema para la gestión y transferencia tecnológica de resultados de proyectos de I+D en materiales biodegradables” en el marco del proyecto CONSOLIDACIÓN DE PROCESOS DE TRANSFERENCIA DE CONOCIMIENTO Y TECNOLOGÍAS PARA LA PRODUCCIÓN DE MATERIALES BIODEGRADABLES DESARROLLADOS EN EL DEPARTAMENTO DEL CAUCA, financiado por el sistema general de regalías Cauca y ejecutando por la Universidad del Cauca.
La tesis doctoral presentó resultados en 4 frentes:
- Nuevo conocimiento: realizó una pasantía doctoral en la Pontificia Universidad Católica de Chile, una estancia de investigación en la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez y escribió un artículo de investigación.
- Transferencia de tecnología: el modelo planteado en el escenario de ceder/vender culminó en la firma de un contrato de cesión de derechos patrimoniales.
- Divulgación: participación en 4 eventos académicos internacionales y uno nacional.
- Invención: Dos patentes. Plato desechable biodegradable elaborado a partir de harina de yuca y Guante biodegradable para consumo de alimentos.



Ambos directores resaltaron la curiosidad, empeño y seriedad con las que Karen abordó cada una de las etapas de este proceso. Además, insistieron en que este tipo de colaboraciones interinstitucionales son muy importantes para el desarrollo exitoso de proyectos basados en las fortalezas que cada entidad puede aportar.
Los evaluadores manifestaron que el trabajo de Karen es muy aplicable y destacaron que el proyecto concluye con patentes de invención registradas y con su transferencia a empresas reales que las aprovecharán para su trabajo productivo. Esta transferencia a través de modelos de licenciamiento o regalías además beneficia a la universidad trayendo recursos frescos que permiten continuar el trabajo de investigación e innovación orientado al mejoramiento de la competitividad de las empresas y el beneficio a sus consumidores y al medio ambiente.
¡Felicitaciones!